HOMBRE Y CIENCIA

Análisis de diversos aspectos sociales, culturales y económicos bajo el enfoque antropológico.

Aporte de la Antropología al proceso administrativo y al desarrollo gerencial.

Metodología de la investigación

Proyecto de Investigación: pasos y procesos para la elaboración de un Proyecto de Investigación.

Desarrollo evolutivo del hombre

Desarrollo evolutivo del hombre
Desarrollo del proceso evolutivo del Hombre

lunes, 19 de abril de 2010

ANTROPOLOGÍA Y GERENCIA

Al hacer mención de la administración moderna, uno de los aspectos en los cuales pensamos en forma inmediata, es el de la gran diversidad de comportamientos estructurales que ella presenta, y que por lógica consecuencia lo hacemos extensivo al proceso de la administración. Así, entendemos la organización empresarial, como un sistema o estructura, en el cual todos y cada uno de los elementos que la conforman presentan una verdadera relación biunívoca, en la cual se establece a la vez; dependencia e incidencia, respondiendo en términos generales a las leyes estructurales que rigen un sistema, como son: La totalidad, las transformaciones y la retroalimentación o "feedback"; presentándose obviamente el fenómeno, de que cualquier modificación que ocurra en alguno de los elementos o subestructuras del sistema o estructura, incidirá necesariamente en todos los demás subsistemas o elementos.

Comúnmente nos referimos al proceso administrativo como aquel que involucra etapas tan importantes como la planeación, la organización, la ejecución o dirección y el control o evaluación, las cuales deben ser consideradas también en forma sistémica, para que se logre realmente una verdadera integración en todo el proceso.

Es común encontrar en los diversos tratadistas sobre administración, cierta concordancia cuando hacen referencia a los tres recursos considerados fundamentales en el quehacer administrativo, nos referimos a los recursos: económico, tecnológico y humano. Y es precisamente sobre este último punto en particular, que considero vale la pena hacer énfasis en aras de una mayor claridad.

La experiencia nos ha demostrado que no podemos considerar al hombre como un simple recurso más en el complejo proceso administrativo, por el contrario, él constituye parte fundamental del mismo, ya que es un elemento vital, sin el cual dicho proceso no se podría dar, dado que la administración efectiva, eficiente y eficaz, solo se obtiene cuando logramos con las personas alcanzar los objetivos que nos hemos propuesto, y de esta manera obtener bienes y servicios, en cantidad, calidad, con plusvalía, al menor costo posible y satisfaciendo las necesidades del cliente. De ahí que enfaticemos, que el hombre (Homo sapiens-sapiens) es la razón de ser de la administración y su ingrediente fundamental y por lo tanto adquiera una gran importancia el conocimiento que de él podamos tener cuando va a iniciar su actividad laboral en una organización.

Esta apreciación de considerar el alto valor que el elemento humano tiene en la administración, ha sido lo que en los últimos años le hemos querido imprimir a todas nuestras diversas actividades laborales y docentes, con el único fín de relievar la importancia del Homo sapiens sapiens epicentro como ya se indicó del proceso administrativo.

De otro lado es importante considerar como en la administración también es susceptible la aplicación del método científico y de una serie de metodologías y técnicas proporcionadas por las ciencias sociales y humanas; así como, de recursos cuantitativos y anlíticos de tanta valía como los que nos proporciona la estadística, para hacer mas confiable y racional el desempeño del administrador en los diversos procesos que a su interior se dan.

Igualmente considero de sumo valor por la trascendencia que hoy tiene, dada la época que vivimos, todo lo relacionado con el entorno familiar, social y económico. Lo cual nos permite de manera contextual y objetiva conocer el ámbito sociocultural en el cual se desarrolla y al cual se ha expuesto el trabajador en su proceso de endoculturación y socialización. Dicha importancia radica en la cultura de la organización y en la subcultura del trabajador, porque como bien sabemos, cada organización tiene su propia escala de valores, su sistema de normas, patrones, y principios que la caracterizan, configurando así su propia cultura, en la mayoría de los casos bien discímil a la cultura arraigada en el medio en el cual le ha tocado socializarse al trabajador. De ahí que el escrutinio de la escala de valores de una persona nos permita deducir sus orígenes, su extracción socio-cultural y su capacidad para respetar las normas morales que se le han inculcado desde los primeros años de su vida, fundamentadas en el ejemplo, influencias y costumbres del hogar.

J. Eduardo Murillo B.